Cadenero nació en una pequeña villa en las salinas a las afueras de la Ciudad de la Cábala con el nombre de Mazeura. Poco se sabe de sus orígenes, pero se conoce que ahí fue donde escogió su fobia a las serpientes, lo que se transformaría más tarde en su marca de demencia, ahí aprendió también a utilizar el arma que le daría su nombre, la cadena.
Cadenero fue enseñado a luchar en el pozo de la cábala (algo así como una arena de gladiadores para el entretenimiento de los cabalistas) por un viejo casi ciego llamado Minat, un lanzador de demencia, quien le sugirió utilizar las cadenas como arma en la arena, ya que era inusual y a las multitudes de la arena le encantaban las cosas inusuales, además de tener un largo alcance sin perder poder de ataque. Le enseñó a Cadenero a utilizar el arma y también cómo mejorarla con magia, de tal manera de crear pesos o puntas en los extremos para herir a sus oponentes, así como también le enseñó a crear nuevos eslabones para permitirle estrangular a sus enemigos. Con el tiempo, Cadenero aprendió a crear las cadenas únicamente a través de la magia. Minat también le enseñó un hechizo poderoso, el Florecimiento de la Muerte, el cual llegó a usar en algunas raras ocasiones para asesinar a oponentes superiores a él.
A medida que las habilidades de Cadenero mejoraron en la arena, fue trasladado a la Ciudad de la Cábala para ser entrenado como un verdadero lanzador de demencia. Fue puesto bajo la tutela de un maestro de demencia llamado Skellum, con quien llegó a establecer una relación similar a la que un hijo tiene con su padre mientras aprendía de demencia, mostrando ser una gran promesa, por lo que Skellum soñó con convertirlo en un maestro de demencia.
Durante uno de sus paseos recreativos por la Ciudad de la Cábala, Cadenero fue atraído por la presencia del Mirari en el sótano de una antigua mansión, lo que le mostró visiones de su propia grandeza, sin embargo, resistió el llamado, decidiendo que el poder del Mirari sería sólo para El Primero de la Cábala.
Mientras se dirigía al palacio del Patriarca (Cabal Patriarch) para entregar su descubrimiento en persona, Cadenero fue enfrentado por la Orden, donde se vio obligado a pelear contra el Mayor Teroh (Major Teroh) y el Oficial Baankis, quienes se encontraban realizando inspecciones de rutina a la gente que entraba a la ciudad bajo la sospecha de poseer artefactos peligrosos. Durante la pelea, Cadenero logró escabullirse y huir a un lugar seguro en un bar de la Cábala, donde se puso en contacto con Skellum, quien lo rescató e hizo que lo llevaran frente al Patriarca para presentarse. Por suerte para Cadenero, los riesgos que tomó pagaron sus esfuerzos debido a la lealtad que demostró al Patriarca al entregarle el Mirari en lugar de quedárselo para él, ganando el favor del Primero.
Cadenero pasó la mayor parte de su tiempo posterior entrenando con Skellum, quien le enseñó a entrar a su espacio de demencia y controlar las criaturas que allí residían, hasta que el entrenamiento se vio interrumpido por los Juegos Lunares que durarían tres días y donde se ofrecía el Mirari como uno de los premios. El Patriarca ordenó a Cadenero a acompañar a uno de los más destacados competidores, un guerrero de la montaña llamado Kamahl, y le indicara cómo entrar en el torneo. En un principio, Cadenero no estaba contento con la tarea, pero pronto creó amistad con el bárbaro a medida que cada uno le enseñó al otro sus métodos. Sin embargo, la tarea de Cadenero se vio interrumpida por el ataque de un dragón sobre la ciudad, mientras Kamahl se dirigió a ayudar a las defensas, Cadenero puso su mente en el Mirari, corrió hacia las bóvedas para protegerlo de cualquier saqueador oportunista. Ahí se enfrentó a un grupo de soldados de la Orden, quienes mataron a dos de sus compañeros cabalistas, incluyendo a su amigo Deidre. Para poder derrotar a los soldados, quienes venían acompañados de un gran Golem de Piedra Caliza (Limestone Golem), Cadenero utilizó parte del poder del Mirari que estaba en el ambiente y desató su hechizo de Florecimiento de la Muerte, destruyendo al gólem y matando a las tropas de la Orden.
En las secuelas del ataque, el Mirari fue entregado al Teniente Kirtar (Lieutenant Kirtar). Cadenero protestó en contra de simplemente entregar este tesoro, pero el Patriarca le aseguró que el orbe prontamente volvería a la Cábala, al igual que todas las cosas valiosas eventualmente lo hacían.
Mientras Kamahl abandonó la ciudad para busca el Mirari, Cadenero volvió a su entrenamiento de demencia, bajo la tutela de Skellum, aprendió a controlar los horrores de su mente y transposarlos en la realidad, adquiriendo el rango de lanzador. Luego de esto, Cadenero volvió a los pozos para ganar experiencia en lanzar durante condiciones de pelea. Ahí se enfrentó a la hermana de Kamahl, Jeska (Jeska, Warrior Adept), así como también al enano Balthor, el corpulento (Balthor the Stout), donde perdió su brazo derecho cuando fue alcanzado por una de las saetas explosivas de Jeska. Se recuperó, recibiendo una mano artificial de gólem muy cara que fue pagada por Skellum, por otro lado, su regreso a los pozos fue exitoso debido a su habilidosa mezcla entre lucha cuerpo a cuerpo e invocaciones.
Luego de un tiempo, la predicción del Patriarca sobre el Mirari se hizo verdad, Cadenero fue testigo de su regreso a la Cábala en las manos de Trenzas (Braids, Cabal Minion), siguiendo su uso catastrófico por la Orden y el Emperador Aboshan (Aboshan, Cephalid Emperor). A este punto, Cadenero también se reunió con Kamahl, quien había estado siguiendo el Mirari en un viaje por todo Otaria. Ambos formaron una camaradería de compañeros de arena y marcaron un récord de doce victorias consecutivas, pero este lazo se rompió cuando el Primero les ordenó perder en su siguiente pelea, esto iba en contra del sentido del honor y juego limpio de Kamahl, por lo que se rehusó a pelear y rompió la camaradería, aunque ambos siguieron siendo amigos fuera de los pozos.
Se decidió que Cadenero se encontraba listo para ascender al rango de dementista, por lo que Skellum organizó las cosas para que se le realizara el Rito de Paso, una ceremonia en la que el aspirante debe entrar al bosque de Krosa para obtener inspiración para crear nuevas bestias de demencia. Sin embargo, El Patriarca sentía que Skellum ahora estaba conteniendo a Cadenero, y ordenó que el maestro muriera en una pelea en la Arena en contra de una cruzada de la Orden dirigida por el mayor Teroh. El plan funcionó de manera “casi” perfecta, ya que Skellum logró canalizar, a través de su magia, su experiencia en la pelea para que Cadenero pudiera verla y ser testigo de la traición del Patriarca. Cadenero observó aterrado el espectáculo y juró vengarse del escuadrón del mayor Teroh. Aún así, Cadenero continuó con su entrenamiento, tomando a Kamahl para que le acompañara a Krosa. El ritual continuó de manera esperada, Cadenero logró capturar entre otras cosas, un mono-lobo y un grendelkin en memoria de Skellum. Hasta logró tener una visión del dios de la Cábala: Kuberr, lo que tomó como una señal de que había pasado la prueba del ritual, y junto con Kamahl, nuevamente volvieron a la ciudad de la Cábala.
Al llegar a la ciudad se toparon con que la Orden estaba atacándola. Inmediatamente se unieron a la batalla, donde Cadenero pudo demostrar sus recién obtenidos poderes, llenando la arena central con bestias de demencia que asesinaron a los invasores. Con esas bajas, la Orden rompió su ataque y huyeron de la ciudad. A pesar de eso, Cadenero no pudo disfrutar de la victoria, ya que su amigo Kamahl sufrió una herida que lo dejó seriamente con riesgos.
Como agradecimiento por la victoria, el Patriarca le permitió a Cadenero utilizar el Mirari, aunque Cadenero quería usarlo dos veces: una para sanar a Kamahl y la otra para completar un acuerdo que tenía con el Embajador Laquatus (Ambassador Laquatus) de crear un nuevo campeón para él. Para utilizar el Mirari dos veces, el Patriarca le solicitó que cobrara venganza sobre el comandante del ataque contra la ciudad, que resultó ser no otro que Teroh, por lo que Cadenero disfrutó de la tarea, asesinando a Teroh, sus soldados, todos los heridos del ataque que se encontraban bajo cuidados en un hospital samita y a casi todos los sanadores inocentes también.
Al retornar, el Patriarca cumplió con su palabra y le permitió a Cadenero utilizar el Mirari, con el que creó a Burke para Laquatus y pudo sanar las heridas de Kamahl, injertándole mágicamente piel de serpiente. Laquatus quedó satisfecho con la creación de Cadenero, pero Kamahl reaccionó mal ante el regalo de Cadenero, de acuerdo con su tradición barbárica, un peleador herido debía sanarse de manera natural y aprender a pelear sin lo que sea que hubiese perdido. Kamahl decidió quemar su piel para quitarse las adiciones antes de convertirse en un exiliado de su cultura, siendo esta acción la que arruinó la amistad que tenía con Cadenero… (Contaremos la historia de Kamahl en otra columna).
Luego del éxito que tuvo Cadenero para dominar el Mirari, comenzó a subir de rango rápidamente en la Cábala, y trabajó de cerca con el Patriarca, quien había quedado impresionado con Burke y le solicitó que hiciera un segundo para que sirviera de guardaespaldas para él… Solo que esta vez, Cadenero tenía otros planes en mente para utilizar el Mirari: asesinar al principal culpable de la muerte de su maestro Skellum, el mismísimo Patriarca. Utilizó el Mirari para potenciar al máximo su hechizo más poderoso: el Florecimiento de la Muerte (en inglés suena mejor: Death Bloom, aunque no se le hizo una carta :(), lo que no esperaba era que el Patriarca sería inmune a su hechizo, ya que había hecho un pacto con Kuberr que lo hizo casi inmortal. En vez de matarlo, lo envió al exilio en Aphetto. Sin el patriarca al mando y con el Mirari bajo su posesión, Cadenero tomó control de la Ciudad de la Cábala y de esa manera cumplió con lo profetizado por el Mirari.
El reinado de Cadenero fue breve, presidió los Juegos del Mirari, pero estos se transformaron en un caos cuando un justiciero de la Orden acompañado de tres ángeles llegaron durante la ceremonia de apertura de los juegos a intentar cobrar venganza por la muerte de Teroh y los samitas. Cadenero se enfureció por el caos y la idiotez que lo rodeaba y decidió reconstruir la Cábala como a él le parecía mejor. Imbuyó de poder el Mirari y extrajo desde el espacio de demencia de cada lanzador de demencia de Otaria todas las criaturas encontradas y las hizo existir dentro de la Ciudad de la Cábala. La matanza continuó hasta que Kamahl decidió enfrentarse a Cadenero, quien trató de convencerlo de dejar de utilizar el Mirari, pero se negó y comenzaron a pelear, obviamente Cadenero presentaba ventaja ya que contaba con el Mirari y Kamahl aún estaba recuperándose de sus heridas, pero Kamahl logró derretir el brazo artificial de Cadenero, lo que causó que Cadenero intentara utilizar el poder del Mirari para sanarse, lo que terminó mal para él… El poder del Mirari lo sobrepasó, reemplazando su cuerpo por una retorcida masa de criaturas de demencia, la inestabilidad y el dolor que le causaron estas transformaciones constantes acabaron causándole la muerte. Luego de esto, todos los horrores que había creado volvieron a las mentes de sus dueños y el Mirari quedó en las manos de Kamahl.
Cadenero está representado en su propia carta: Chainer, Dementia Master
Tiene dos cartas que se le asocian directamente:
Chainer’s Edict
Chainer’s Torment
Y se le cita o hace referencia indirecta en las siguientes cartas:
Balshan CollaboratorCast Down
Insidious Dreams
Laquatus’s Champion(Burke)
Mutilate(de la edición “Torment”)
Shambling Swarm
Waste Away
Wormfang Turtle
Y tú? Cómo armarías un Chainer, Dementia Master? Te invito a que nos envíes tu decklist, ya sea asociado al Lore del personaje o buscando algo más competitivo.
Recuerden que en los comentarios de nuestra página pueden pedir que escriba sobre sus personajes favoritos de nuestro juego favorito, ya sean sus comandantes o de sus oponentes, la Biblioteca de Argivia tiene la historia de todos!