Comandantes! bienvenidos el día de hoy a un artículo que me tuvo más tiempo del que tenía presupuestado, pero espero que esta demora adicional haya sido para bien.
Hace no mucho tuvimos a Kamigawa: Neon Dynasty y como siempre como staff de landfall empezamos a discutir sobre qué legendarias nos llamaron la atención para poder generar nuevo contenido y decklist y sobre esa conversación conocí a Tameshi.
Que pensé cuando lo vi:
- No quiero que sea una nueva versión más de un casi-brago.
- No quiero tener que llevar mandalas para colorear o un UNO para mis oponentes mientras juego turnos de 1 hora sin ganar.
- ¿Por qué me estoy haciendo el daño de construir una baraja azorio si llevo rakdos en el alma?
Aclaración: no tengo nada contra los jugadores de azorio, es simplemente que para mi estilo de juego y para lo que a mi me divierte en una mesa de commander es precisamente el caos, así que con esto me cuestioné ¿Qué puedo construir pensando en Kamigawa, sin alejarme tanto del caos, pero dentro de mi zona de confort? (RB).
Con lo anterior en mente, fui trabajando más mi idea de Tameshi (no les adjunto enlace de ese decklist porque realmente lo considero injugable), me topé también con gente que construyó versiones de Tameshi combo, artifacts, land matters, entre otras y me di cuenta de que una mezcla entre tempo-control hasta que explota en un turno decisivo, era lo que más se repetía, así que me puse a buscar entre mis barajas respaldadas qué tenía y nada, no tenía ninguna baraja que se asimilara mucho a esa idea. Volví tristemente y derrotado a revisar en mi colección alguna otra cosa que construir hasta que mi pasado mi condenó, era hora de invocar al gran jefe sapo.
Mi primer acercamiento a TCG y CCG fue con el de Naruto, así que entre mis challas mientras buscaba a mi futuro comandante, me topé con el siguiente cartón:
En menos de 30 segundos desde que lo vi y recordé todo el potencial de ese pequeño Sapo que no hacia nada por si solo, me puse a buscar un Tatsunari que recordaba haber abierto en un sobre y pensar “qué ganas de armar una baraja tribal sapos”…
*Spoiler alert: Esa idea también fracasó estrepitósamente.
había fallado horriblemente con Tameshi, pero con Tatsunari me pasó que no me iba tan mal, pero tampoco me divertía lo suficiente, sentía que al jugar combos de sultai encantamientos era bastante aburrido, si quieren conocerlos, es cosa de abrir edhrec o youtube, escribir tatsunari edh y verán millones de versiones del la misma baraja con maná infinito y kinnan o con algún aura que pagando cierto coste se sube a la mano, se vuelve a castear y drena hasta el aburrimiento con keimi.
Con tanto fallo detrás, fui dándome cuenta de un pequeño gran detalle, Keimi al igual que Gama, no era más que un cuerpo adicional, por lo cual al tener a Tatsunari en zona de mando, con la construcción adecuada pasaba a tener 2 cuerpos en zona de mando en vez de sólo uno y ahí fue cuando finalmente me di cuenta del verdadero potencial que tenía como baraja mono black.
Entre el ir y venir, sacar todas las cosas de colores o que necesitarán maná negro para funcionar, llegué a la conclusión que un mono black enchantress nevado fue finalmente una combinación mucho más estable y con menos pasos para poder llevarme a la victoria:
En mono black: tenía el ramp suficiente con tierras (cabal coffers, cabal stronghold y nykthos), acceso a tutores (que si bien no soy fan de ellos en commander, dejo un par en caso de emergencia) y aprovecho el potencial de Keimi de otorgarme sustain drenando vidas de a poco.
Enchantress: en negro te da acceso a cosas bastante útiles y que generalmente no tendrían tanto peso por ser de nicho como lo son el doomwake giant o la thoughtrender lamia y si bien no tiene que ver con enchantress, Gary en un mazo devoción muchas veces era el finisher que no necesitaba, pero que me hacía recuperarme para darme tiempo de terminar la partida con otra cosa.
Nevado: una de las cosas que más necesita la baraja es mantener a raya a los oponentes y mantener más cuerpos en mesa, es por ello que blood on the snow si bien es sólo un área, nos permitirá limpiar la mesa dándonos la ventaja de recuperar a tatsunari, el mismo Gary para cerrar la partido o incluso permitirnos lujos como reanimar un Torgaar y alinearle los chakras al oponente que se pasó de listo ganando vidas.
Con todo eso y más, la baraja final a la que llegué es la siguiente:
Tengo que admitir que no escatimé en gastos como en las barajas que suelo publicar con el team budget, pero es porque finalmente esta baraja sufrió tantas variaciones con el paso del tiempo que terminé desarmando todas las demás barajas que tenía para poder jugarla y lograr lo que quería con una baraja azoria, pero con mono black. Deben haber millones de formas mejores de aprovechar las características de Tatsunari y su pseudo evasión con hatred y cosas por el estilo, pero así es como personalmente logré resolver esta ecuación y no quería dejar pasar la oportunidad de compartirles esta baraja llena de cosas que no son lo que parecen y muchos sapos yendo y viniendo al campo de batalla.
Hasta aquí llego por hoy comandantes, espero que lo hayan disfrutado y espero nos veamos pronto con algún decktech un poco más budget! buenas mesas para todos!
