***Este artículo está escrito desde la perspectiva de un coleccionista de un producto en específico***
Cuando empecé a jugar Magic, lo hice emigrando desde otro juego de cartas coleccionables, uno que me gustaba mucho por que las cartas eran personajes históricos, folklóricos y leyendas de diferentes culturas alrededor del mundo, tenía un feeling especial.
Esa sensación la encontré en el formato de EDH, que por entonces apenas estaba siendo notado por Wizards; para seleccionar un comandante había que revisar las listas antiguas, te encontrabas con algunos que parecían muy poderosos y de hecho ya estaban prohibidos, como Kokusho (después lo liberarían) y algunos que eran legales pero muy raros de ver como Arcum Dagsson, y las leyendas que iban saliendo en las nuevas expansiones , las cuales no siempre eran adecuadas para el formato, pero había suficientes. Y lo más importante, ya había variedad, tanto en comandantes, como de armado.
Para armar mis mazos, era echarse viajes a carpetas de cartas que ya no estaban en estándar, encontraba uno ciertas joyas, y buscando en ellas, me enteré que hubo mazos de Commander, una verdadera rareza en la época por el tiraje limitado y que eran tanto comandantes (Animar, Kaalia, Riku, Edric) como cartas (Stranglehold , Chaos Warp , Flusterstorm ) muy interesantes, y en esos días, la única edición para tener una Command Tower.
Pero llegó algo que me marcaría, en 2013 sacarían nuevamente mazos de Commander. Un set entero con comandantes nuevos, cartas exclusivas, reimpresiones, Sol Ring’s y Command Tower’s. ¿Dónde firmo? Leí en muchos foros que eran una basura, que las reimpresiones no eran las adecuadas, que los comandantes esto, bla, bla, etc… ya saben, lo que dicen más o menos cada edición. Los adquirí y fui muy feliz. Por primera vez pude armar más de un mazo, variar estrategias, tener suficientes Command Tower y Sol Ring , y cartas que eran muy útiles que no sabía que existían. El ciclo de tentaciones me pareció muy interesante y, en lo personal, hasta la fecha considero que son las cartas más comanderosas que hay: “voy a beneficiarme, y si ustedes oponentes quieren compartir el beneficio, yo me beneficio aún más”. Aun hoy juego Oloro, Ageless Ascetic y Prossh, Skyraider of Kher tiene un lugar tan importante para mí que lo mandé a hacer en estatua de plastilina epóxica.
Al año siguiente, anunciaron nuevos mazos de Commander. Sin mucha dilación decidí adquirirlos nuevamente. La verdad me gustaba mucho el contenido del paquete, la hoja con la deck list y la estrategia del mazo, un pequeño párrafo del por qué las criaturas son leyenda, además de las cartas Oversized de los comandantes, la cajita se sentía resistente, en fin, se sentía un buen producto. Los años siguientes, la edición de Commander era mi época favorita del año. Si bien empezaron a reducir la calidad de las cajas, lo compensaron metiendo los tokens del mazo. Yo he sido muy feliz coleccionando este producto desde entonces, ha sido un sacrificio de espacio, pero no he movido ni una sola tierra básica o token, tengo todas las cartas debidamente guardadas en carpetas y tengo un tracking de cada carta que uso en mis mazos, y si la dejo de usar, regresa a su lugar.
Llegando a Ikoria, algo se rompió. No solo fue que anunciaron que cada expansión ahora tendría dos mazos de commander, si no que al ver las cartas vi muchas de estándar… y no es que estuvieran mal, si no que traían el símbolo de Ikoria y no el de Commander. Sentí ese detalle como que ya estaban poniendo menos esfuerzo en el set. Esto se repitió con los que vinieron después. Al llegar a Strixhaven, Zaffai, Thunder Conductor que en la caja de Texto se refiere a sí mismo como Zaffai, Thunder Collector, es para mi apreciación muy personal e independiente de si lo reparan o no, una cachetada al consumidor por el poco cuidado de calidad que están teniendo…
… y no sólo en el Commander, siento que cada vez se esfuerzan menos en innovar y solo empiezan a hacer cartas OP que rompen o desequilibran el/los formatos en afán de vender más, Comandantes de piloto automático, cartas con efectos que son básicamente redundantes con otras que ya existían para maximizar una sola estrategia y que hacen repetitivo el armado; Cartas miscut o misprint eran raras de ver y por lo tanto una exquisitez, pero hoy son mucho más comunes; sin contar que ya cada expansión tiene cartas para commander, y ya cada vez es más frecuente el producto nuevo, digo, no termino de conseguir las cartas para un mazo y poder jugarlo cuando WoTC ya está haciendo spoilers de cartas nuevas para esa estrategia o para nuevos comandantes, y en varias versiones de arte, arte extendido, showcase, versiones sketch (que se me hacen otra cachetada por hacer más rara una carta, y por ende más cara siendo que técnicamente es un trabajo no terminado)…
… Al abrir los mazos de D&D, me sentí extraño, una calidad inferior a lo que recuerdo, cartas que no se ven tan interesantes, un producto que se siente muy forzado, como si no lo hubieran querido hacer realmente pero necesitaban mi dinero.
Así entré a los últimos commander, que de nuevo van a ser cuatro.
– “¡¿Otra vez cuatro?!” – Mi cartera
Empezaba a contar el dinero necesario para continuar con mi colección, cuando leí que revelaron cartas que están pensadas para commander, pero que solo saldrán en Set Booster. Ese fue mi límite. Hasta aquí pude llegar, aquí dije basta.
No me arrepiento de mi colección, pero ya me siento como cuando termina la fiesta de madrugada, ya no oyes la música, solo el bombo y el bajo, y el alcohol ya no te sabe a nada y te das cuenta que desde hace un rato ya solo lo bebías por beberlo.
¿Ustedes, hasta donde dirán basta?
**Extraño muchísimo a ese WoTC que iba tras mi dinero con productos verdaderamente premium como el Commander Arsenal. ¿Dónde esta ese wizards? Lo necesitamos.