Hoy les contaremos la historia de Ixidor, ilusionista alineado con el color azul que causó estragos en Dominaria. Creó un paraiso a partir de un desierto, logró hacer que dos ejércitos enemigos entre ellos se unieran para hacer una guerra contra él y sus creaciones y finalmente es devorado, para resurgir como otra persona.
La historia de Ixidor se desarrolla en Dominaria, específicamente en el continente de Otaria en los tiempos en que el Mirari todavía estaba en ese plano y la cábala dominaba el contiente, lucrando con peleas en el foso y venerando a un “dios” llamado Kuberr.
Ixidor y sus ilusiones
Ixidor, Reality Sculptor era un hechicero oriundo de Otaria que luchaba en el foso de la cábala junto a Nivea, mujer a quien amaba con locura. El foso de la cábala era una muy buena fuente de dinero para luchadores poderosos, arriesgando sus vidas en cada pelea. Ixidor y Nivea eran una pareja de contendientes sumamente exitosos; él consideraba que luchar en el foso era un arte, mientras ella solo quería juntar suficiente dinero para salir de ahí.
Ixidor tuvo una genial idea para juntar suficiente dinero para cumplir el sueño de Nivea, crear monedas de plomo disfrazadas de oro para poder hacer una apuesta suficientemente grande para salir de ahí, con lo que no serían descubiertos. Solo tenían que ganar ese combate y así podrían irse para siempre. Para su mala suerte, justo aquél día fue la primera lucha de Phage the Untouchable.
En una batalla donde nuestra pareja de luchadores poco pudieron hacer, el simple toque de Phage descompuso el cuerpo de Nivea, destruyendo consigo los sueños, esperanzas y la propia vida de Ixidor. Ixidor perdió el conocimiento para despertar siendo arrastrado a un vasto desierto, ya que al perder su truco con dinero falso fue descubierto y la cábala decidió quitar todas sus pertenencias y abandonarlo en medio de la nada como castigo.
La locura
Ixidor revivió la muerte de Nivea frente a sus ojos miles de veces mientras deambulaba por el desierto. A lo lejos vio muchas ilusiones, pero al llegar a ellas, todo desaparecía en la arena. Por el estado en el que estaba, había empezado a delirar. Ya habían pasado días, cuando vio que una tormenta se acercaba. Se sentó a esperarla y poder rehidratarse, para solo encontrarse que lo que venía era una tormenta de arena, la cual cuando llegó lo enterró completamente. En ese momento, Ixidor pensó: “Nivea, escúchame, me uniré a ti, pero no todavía, ahora debo vivir. Ven, mi angel, desentiérrame y sálvame”. Puso toda su voluntad en este pensamiento, y luego vio un ángel venir a salvarlo, desmayándose después de esto.
Al despertar (vivo y no enterrado), se encontraba completamente solo y en su desesperación pidió a Nivea que lo llevara a una fuente de agua. Vio una luz a lo lejos y la siguió. La luz se alejaba y parecía bailar frente a él y nuevamente vio un espejismo: una cueva, un arrollo y una palmera. Ixidor sabía que era un espejismo más, pero siguió avanzando hacia él y el espejismo seguía ahí. Había encontrado una fuente de agua real.
Ixidor luego pensó que este lugar debería tener animales también, por lo que tomó un puñado de arena y al caer de sus manos, se formaron animales que parecían camarones. Dándose cuenta que se movían en el agua, tomó uno y notó que era un camarón de carne y hueso exoesqueleto. Ahí fue cuando entendió que él podía controlar la realidad, y sus creaciones podían dañarlo, podían matarlo y, lo más importante, podían alimentarlo.
Ixidior nuevamente vio la figura angelical de Nivea y prometió crear un paraiso digno de ella. Entonces empezó a crear su propio país, Topos, con cascadas, selvas, y animales que vivían aquí. Como su hogar, creó Locus, una fortaleza digna de hospedar su locura. Construyó de la arena a 6 no-humanos, seres antropomorficos que tenían vida y le servían directamente.
Una vez creado este mundo, Ixidor tuvo un sueño en que Phage iba a su fortaleza a atacarlo y persiguiéndolo incesablemente. Finalmente, logra alcanzarlo y toca su brazo derecho, el cual tuvo que arrancarse de si mismo paraevitar que la putrefacción llegara al resto de su cuerpo. Cuando estaba a punto de tocar nuevamente a Ixidor para dar un golpe mortal, un ángel de piel color alabastro y rostro de Nivea detuvo el ataque. Al despertar, su brazo derecho no estaba en su cuerpo, y el ángel estaba a su lado e Ixidor le dio una misión, vengar a Nivea y matar a Phage. Luego la nombró Akroma, angel of Wrath.
Akroma, angel de venganza
Mientras tanto, en la lucha inaugural del recién creado Grand Coliseum, Kamahl acaba de derrotar a Phage en una pelea con el objetivo de recuperarla y sanarla de la corrupción de la cábala, para así poder recuperar a Jeska que estaba “atrapada” en el cuerpo de Phage. Es justo en este momento, cuando Akroma aparece con la intención de matar a Phage, como le ordenó su creador. Luego de una improvisada pelea, Kamahl y su ejército logran vencer a Akroma, quien decide volver a Ixidor.
Cuando la Cábala y Kamahl se dan cuenta de la amenza que es Akroma para ellos, y que no se detendrá hasta matar a Phage, deciden unirse y marchar a Topos para acabar con ella. Luego de un mes en que amasaron sus ejércitos, emprendieron rumbo al nuevo país de Ixidor.
En el límite de Topos y el desierto, Ixidor les hizo entender que no los dejaría pasar mediante un mensajero, y que tendrían que luchar. Mientras ellos avanzaban, él creaba más y más criaturas para palear con ellos. Las defensas de Ixidor empezaban a flaquear, por lo que se le ocurrió crear criaturas a partir de ellos, por lo que envió chispas capaces de hacer realidad las pesadillas de cada persona.
La batalla de las sierpes
Aquí es donde la historia cambia su rumbo, ya que Jeska (de quien pueden leer más aquí), quien todavía vivía dentro de Phage, sentía el dolor y culpa por cada asesinato que ella cometía, y esas eran las mayores pesadillas que tenía. Por lo tanto, cuando la magia de Ixidor llegó a ella, se manifestó asesinato cometido como Sierpes Muertas (deathwurms), las cuales empezaron a devorar todo a su paso. Cuando pasó esto, Jeska al fin dejó de ser Phage y volvió a su antiguo ser, libre de la corrupción de la Cábala.
Una de las Sierpes Muertas parecía sentirse especialmente atraída a Ixidor, por lo que lo siguió hasta encontrarlo. Esto porque esa sierpe fue creada con la muerte de Nivea, por lo que contenía su escencia dentro de sí misma. Él podía escapar por medio de portales hechos desde sus no-humanos que debían morir al cerrar su portal, pero finalmente tres de ellos lo traicionaron y dejaron un portal abierto, por lo que la sierpe pudo atravesarlo y comer a Ixidor.
Jeska se da cuenta que no podrán matar a todas las sierpes, por lo que decide sacrificarse y hacer que todas vuelvan a su interior, volviendo así a ser Phage. Sin embargo, una sierpe no vuelve y se queda en el mundo deambulando, y es la sierpe que se comió a Ixidor.
En el estómago de la sierpe, Ixidor por fin encontró a Nivea.
El renacer
Ixidor se mantuvo en el estómago de la Sierpe obsesionado con el cuerpo de Nivea que se encontraba dentro de esta, optando por quedarse para siempre aquí para poder estar con su compañía. Akroma decidió buscar la sierpe para saber qué pasó con su creador, encontrandola y dejándose comer por esta. Dentro del estómago de la sierpe encontró a Ixidor, quien le dijo que lo dejara y le mostró cómo salir de la sierpe.
Luego de ello y de muchos otros eventos, Kamahl accidentalmente creó a Karona, False god al intentar acabar con Phage y Akroma (y casualmente Zagorka) con el arma Soul Reaper, fusionando a las tres en un único ser con los 5 colores. Karona era instantáneamente alabada por todos los que la veían, excepto Kamahl (aparentemente por ser su creador). Kamahl se da cuenta de la amenaza que esto representa para Otaria, y decide ir en busca de Ixidor para que lo ayude a acabar con Karona.
Kamahl también se deja comer por la sierpe (una costumbre muy extraña de todos estos personajes) y encuentra a Ixidor, quien nuevamente se prefiere quedar con los restos de Nivea. Sin embargo, Kamahl no es muy paciente y decide destruir el cadaver de Nivea y acabar con la sierpe desde adentro. Ixidor lo sigue luego de salir de su estupefacción. Al salir de la sierpe, Ixidor parece ser una persona completamente distinta, explicándola a Kamahl que él ya no era quien solía ser, sino que ahora es Lowallyn, un ser que encarna el mana azul y que le dio la capacidad de hacer realidad sus ilusiones a Ixidor.
Con ello concluye la historia de Ixidor, ya que en el instante que Kamahl destruye a Nivea el ser que vivía dentro de Ixidor toma posesión de su cuerpo, eliminando a Ixidor. La historia de Lowallyn y los númena queda para otra ocasión, como también la conclusión del ciclo de Karona y el Mirari.