La ira de Yahenni
Tiny Leaders es un museo a escala de Magic. Un formato singleton sólo de cartas con coste hasta 3 que se convierte en un espacio para pensar en Magic de una manera estratégica y limitada, pero teniendo en cuenta la historia del juego. Tiny Leaders permite hacernos la pregunta por cómo reproducir en pequeña escala alguna estrategia que alguna vez fue deslumbrante en otro formato, a la vez que demostrar la consistencia que Magic tiene como juego. Así es como en formato Tiny podemos encontrar versiones clásicas de mono-red burn, de lands control, de pequeños affinity y muy veloces infect.
Desde hace un tiempo, me propuse pensar en menor escala esos clásicos mazos mono-black, cuya política era la máxima expresión del control. Para ello era necesario pensar en un buen líder negro de conste máximo 3. Las mejores opciones disponibles eran las ya probadas: Toshiro Umezawa y su repetidor de instantáneos; Maralen of the Mornsong y el multiplicador del tutor; Maga, Traitor to Mortals y su black fireball. Otras opciones tan buenas como Drana, Liberator of Malakir o Liliana, Heretical Healer no estaban en armonía con el plan de destruirlo todo y controlar el juego hasta dar el zarpazo final, aunque sí funcionan bien en mazos algo más agresivos en cuanto a criaturas. Mi interés estaba puesto en ir contra la intuición de usar muchas criaturas en Tiny Leaders y poder liberar así espacio para el control.
En ese sentido, Toshiro Umezawa presenta una buena habilidad, pero reduce el asunto a instantáneos, cuando las mejores estrellas del color negro están en los conjuros. Maralen es poco funcional, ya que habría que diseñar una estrategia específica para lanzarla en la fase final de la partida y dar el impacto terminal con una última búsqueda. Finalmente, Maga sirve como un nuevo finisher, al no tener tope en el daño que puede hacer. Estaba en esa búsqueda, cuyo resultado me convencía muy poco, cuando anuncian una nueva parte del spoiler de La Revuelta del Éter y aparece el líder que buscaba: Yahenni, Undying Partisan. Una combinación ideal entre agresividad y control, dado que es una especie de vampiro artificial que se alimenta de la sangre de los difuntos. Y como por si fuera poco, ¡tiene prisa!
Es así como Yahenni se convirtió en mi líder, que entraría una y otra vez, pegando rápidamente de a dos en dos, y creciendo de acuerdo a mi capacidad para deshacerme de las criaturas oponentes. Y con eso en mente, además de rendirle tributo a los clásicos mazos mono-black, que surgió este mazo.
Decklist
1 Liliana, the Last Hope
1 Geralf’s Messenger
1 Vampire Nighthawk
1 Drain Life
1 Consume Spirit
1 Profane Command
1 Torment of Hailfire
1 Sinkhole
1 Rain of Tears
1 Icequake
1 Choking Sands
1 Rancid Earth
1 Night’s Whisper
1 Sign in Blood
1 Sword-Point Diplomacy
1 Inquisition of Kozilek
1 Thoughtseize
1 Duress
1 Hymn to Tourach
1 Toxic Deluge
1 Dismember
1 Smother
1 Fatal Push
1 Geth’s Verdict
1 Chainer’s Edict
1 Diabolic Edict
1 Innocent Blood
1 Collective Brutality
1 Smallpox
1 Jet Medallion
1 Dark Ritual
1 Cabal Ritual
1 Wasteland
1 Ghost Quarter
1 Ifnir Deadlands
1 Cabal Coffers
1 Polluted Delta
12 Swamp
Sideboard
1 Forced March
1 Bontu’s Last Reckoning
1 Sadistic Sacrament
1 Augur of Skulls
1 Distress
1 Powder Keg
1 Ratchet Bomb
1 Pithing Needle
1 Elixir of Immortality
1 Sun Droplet
Con Yahenni dispuesto a entrar al campo de batalla en cualquier momento, la idea del mazo es controlar y destruir todo lo posible hasta lograr las condiciones de lanzar win conditions tan gordos como sea posible. El mazo, de esa manera, abusa de los removals individuales disponibles en negro, como son Smother o Dismember, pero principalmente abusando de los removals sacrificiales, muy útiles contra cartas con protección contra negro o antimaleficio, algunas tan relevantes en el formato como el caso del Geist of Saint Traft. Así es como Geth’s Veredict, Chainer’s Edict y Diabolical Edict se roban la película en los primeros turnos, y sobre todo Innocent Blood que en algunas partidas es un gran drop1. Chainer’s Edict, además, presenta la virtud se ser una carta central para el late game, pues en caso de alargarse mucho la partida, los jugadores, llenos de tierras y sin cartas en mano, sólo consiguen lanzar a su líder. Todo esto, por cierto, es el alimento de nuestro Yahenni.
Ante la ausencia de Damnation y Nevinyrral’s Disc, contamos con la gran Toxic Deluge, un staple de color negro. Y en caso de ser aún más necesario, tenemos Forced March y Bontu’s Last Reckoning, que permiten librarse de todo con un solo golpe, especialmente de las tokens que puede poner algún animado UW o un inflador Abzan.
Resuelto el control de plagas, al comando de Liliana, the Last Hope y el resto de los removals, nos queda prevenir que la estrategia del oponente se vaya por otra parte. Es así como es necesario hacerse de los mejores descartadores de negro, como Duress, Thoughtseize e Inquisition of Kozilek, que brillan de manera especial en este formato. Para completar el asunto contamos en el drop2 con un potente Hymn of Tourach y una multifacética Collective Brutallity.
Luego, para mostrar una variante de los mazos control disponibles en Tiny Leaders, le di un giro rompetierras, algo a veces inesperado y contra lo cual suele no haber mucha respuesta por parte de otros mazos control. Negro cuenta con un set de rompetierras de drop3, lo que se puede acelerar vía Dark Ritual o Cabal Ritual, y que se puede complementar con Wasteland y Ghost Quarter. El giro rompetierras permite retrasar la estrategia del oponente y a la vez acumular pantanos, que es lo central para engordar los win conditions.
Finalmente, con un oponente debilitado, queda lanzar los clásicos Drain Life y Consume Spirit, los que en casos de urgencia también son útiles removals. Tenemos el Profane Command que nos permite reanimar alguna de las dos criaturas en el mazo o remover algún insoportable bicho rival. Todas condiciones muy lindas para ganar, pero ninguna como el querido Torment of Hailfire. Un oponente con pocas vidas, pocas criaturas y escasas cartas en la mano, tiene muy poco que hacer cuando le lanzamos un Torment of Hailfire de 8 ó 9 ciclos, gracias a la inigualable Cabal Coffers.
En cuanto a las debilidades anotamos los mazos mill y los rush burn. Las respuestas de sideboard en negro son escasas, pero puntuales: tenemos, básicamente, el Elixir of Immortality contra mill y el Sun Droplet contra burn. En ambos casos es conveniente remover del main los removals de criaturas y sumar algunos descartes como Distress y el Augur of Skulls.
FNM 23 de marzo de 2018
Yahenni ya lo he probado en diversas instancias y funciona muy bien, quedado rápidamente posicionado en los tops de los torneos que habitualmente se desarrollan como FNM en Imperio Games. Este viernes pasado logró obtener el primer lugar, tras derrotar tres mazos diferentes.
Match 1
La primera partida fue contra un mazo Athreos, God of Passage. Este mazo presenta una combinación de colores poco efectiva contra mono-black, ya que por lo general tiende al control de criaturas y ralentización del juego, ambas cuestiones que favorecen al despliegue de la estrategia de Yahenni. Para mi sorpresa este no era el clásico Athreos combo, lleno de criaturas que vuelven una y otra vez a la mano esperando a que el oponente se desangre. Era más bien una versión aggro de BW, por lo que la estrategia más fuerte contra él era jugarle al rompetierras. Es así como la primera partida la gané fácilmente al dejarlo sin tierras y con un Yahenni atacando en solitario y sin obstáculos. La segunda partida se me pus cuesta arriba, ya que tuve un mana flood importante y el jugador logró habitarme con un Athreos y alta devoción de criaturas. Me asombró que el jugador en cada partida jugó Gerrard’s Battle Cry, algo que no había visto antes en el formato, y que le funcionaba bastante bien. En la tercera partida le gané gracias a que lanzaba duress creatures como Brain Maggot o Tidehollow Sculler, las que morían pero se devolvían a su mano gracias a Athreos, algo que no obstaba que mi Yahenni ganara una gran cantidad de contadores +1/+1 y terminar rematando con Torment of Hailfire.
Match 2
La segunda partida fue particularmente entretenida. Era un mazo Jori En, Ruin Diver. Las versiones que conocía de ese mazo eran, de una u otra manera, burn. Sabía que debía tener cuidado con los Lightning Bolt y los Snapcaster Mage, además de específicos contrahechizos. Nunca había tenido problemas contra un mazo UR, pero esta versión de Jori En iba por otra ruta, ya que era aggro destinado a hacer crecer a las criaturas por el prowess y con hechizos como Reckless Charge y Built to Smash. La primera partida perdí al no poder hacerme cargo de ataques tan masivos. Ya conociendo la estrategia, pude hacerme de la carta que, a la larga, fue el MVP por lejos: Sun Droplet. Lo que el mazo Jori En no esperaba era que me recuperara tan velozmente mis vidas, ya que si bien en las siguientes partidas logró tenerme en 4 ó 3 vidas, prontamente volvía a tener 10 ú 11, lo que me permitía acaparar maná hasta lanzar sendos Torment of Hailfire letales. Además del Sun Droplet, Augur of Skulls fue una carta determinante, al ser un perfecto bloqueador al mismo tiempo que un descartador definitivo.
Match 3
Este era un juego contra mi mejor amigo, así que el match lo conocíamos de memoria tras estar jugándolo por casi 15 años. Mi amigo jugó la variante control-encantamientos de Selvala, Explorer Returned. Mono-black no tiene cómo deshacerse de encantamientos, a no ser por Ratchet Bomb. Como el mazo tampoco es de demasiadas criaturas, el control no es tan útil. Es por eso que rompetierras es fundamental contra este tipo de mazos, lo que sumado al descarte, se obtiene una ventaja muy grande a favor.
Post-torneo
Yahenni como líder de mono-black funciona muy bien, porque consigue controlar de manera efectiva a los mazos que habitan con criaturas o tokens, además de ser eficiente contra otros mazos control. El mazo podría mejorar con alguna Liliana of the Veil o con un Urborg, Tomb of Yawgmoth, aunque sería un boost casi tan estético como jugar las tierras básicas foil, ya que los problemas que esas cartas vienen a solucionar no son determinantes en el juego visto desde lejos. Si hablamos de problemas, hay unos que son más fuertes, como el caso de no tener grandes maneras de derrotar a mazos rush como serían las variantes de mono-red, o mazos cuya estrategia dependa de algún artefacto como las espadas duales, ya que mono-black no cuenta con maneras muy efectivas para deshacerse de artefactos, fuera de Ratchet Bomb o el mismo descarte.
Si tuviera la oportunidad de diseñar una carta que resolviera problemas vitales para Yahenni, esa sería esta: